La tecnología está en todas partes. En cosas tan refinadas como el microprocesador que opera un robot autónomo en la superficie de Marte como en otras tan mundanas como un simple tenedor. Al fin y al cabo, cualquier aplicación práctica de conocimiento en forma de herramienta es un ejemplo de tecnología. Y en el ámbito de la salud y los cuidados los avances en estas herramientas son tan importantes como los progresos teóricos.
Conocer cómo funciona el cuerpo humano y cómo se comportan las distintas enfermedades es vital pero insuficiente para paliar sus síntomas y llegar a su remisión o, en su caso, brindar una mejor calidad de vida a quienes tengan que convivir con alguna de ellas. Es aquí dónde la aparición de nuevas tecnologías brilla: permitiendo la mejor detección y prevención de diversas patologías, ofreciendo nuevos métodos para la suministración de medicamentos y con útiles que faciliten la recuperación o el desarrollo de una vida mejor a personas que, por cualquier afección, verían limitada su experiencia.
La revolución tecnológica ha llegado a la salud
El siglo XXI nos ha traído la hiperconexión y la globalización y, de la mano, el desarrollo a ritmo vertiginoso de nuevas herramientas y aplicaciones tecnológicas en el ámbito de la salud y los cuidados. Desde dispositivos portátiles que monitorean constantes vitales en tiempo real hasta aplicaciones móviles que permiten el seguimiento de tratamientos médicos, la tecnología está transformando la manera en que entendemos y gestionamos la salud.
Sin embargo, muchos de estos avances son aún desconocidos para los agentes de cuidados que deben aplicarlos o para sus usuarios finales. En ADeNfermero estamos convencidos de que uno de los principales retos de la nueva enfermería y de los cuidados avanzados de precisión para esta década está en mantenerse a la vanguardia de la innovación para poder adaptar estas novedades a los sistemas de salud, las necesidades de sus usuarios y de facilitar y fomentar su uso.

Es por esta razón que nuestra próxima reunión científica, que se celebrará el 7 de marzo en Alicante, girará en torno a las terapias de cuidados que aprovechen al máximo uno de los frentes abiertos por estas tecnologías: el de la digitalización. Gracias a ella, los cuidados podrán descentralizarse del espacio físico y ser accesibles (al menos en parte) desde cualquier lugar, facilitando la experiencia a un gran número de personas.
La digitalización no solo implica la adopción de nuevas herramientas, sino también un cambio en la mentalidad y en la forma de trabajar de los profesionales de la salud. Para poder atender este acercamiento a unas nuevas terapias digitales, es crucial contar con la mirada experta de la profesión enfermera, que goza del privilegio del contacto directo y constante con el paciente. Es desde aquí desde donde podremos liderar que su implantación sea adecuada y se adapte a las necesidades y demandas de los agentes de cuidados y de sus usuarios sin dejar a nadie atrás, evitando que se conviertan en un obstáculo en lugar de un punto de apoyo.
La tecnología en la salud del día a día
Entre las innovaciones más destacadas en el ámbito de la salud se encuentran los dispositivos de telemedicina, que permiten a los pacientes recibir atención médica sin necesidad de desplazarse. Estos dispositivos, que van desde cámaras de alta resolución hasta sensores de monitoreo remoto, están revolucionando la atención primaria y especializada, haciendo que los cuidados sean más accesibles y eficientes.
Además, la inteligencia artificial (IA) está jugando un papel cada vez más importante en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades. Algoritmos avanzados pueden analizar grandes volúmenes de datos médicos para identificar patrones y predecir brotes de enfermedades, lo que permite una intervención temprana y más efectiva. La IA también está siendo utilizada para personalizar tratamientos, ajustando las dosis de medicamentos en función de las necesidades específicas de cada paciente.
El valor de la divulgación
Los profesionales de la salud deben estar informados y capacitados sobre el uso de nuevas herramientas, y los pacientes deben entender los beneficios y el funcionamiento de estas tecnologías.
Las campañas de divulgación científica juegan un papel crucial en este proceso. A través de artículos, seminarios, talleres y materiales educativos, se puede aumentar la conciencia y el conocimiento sobre las nuevas tecnologías en salud. Además, es importante fomentar un diálogo abierto entre desarrolladores de tecnología, profesionales de la salud y pacientes para asegurar que las innovaciones se adapten a las necesidades reales y sean aceptadas por todos los involucrados.
La tecnología que usas sin pensarlo
Hoy en día son habituales los relojes inteligentes y las pulseras de actividad, permitiendo a muchas personas monitorear su salud de manera continua. Estos dispositivos pueden medir la frecuencia cardíaca, los niveles de oxígeno en sangre, la calidad del sueño y otros parámetros vitales, proporcionando datos valiosos tanto para los usuarios como para los profesionales de la salud.
Otro ejemplo es el uso de aplicaciones móviles para la gestión de enfermedades crónicas. Pacientes con diabetes, hipertensión o enfermedades cardiovasculares pueden utilizar estas aplicaciones para registrar sus mediciones diarias, recibir recordatorios de medicación y acceder a consejos personalizados. Esto no solo mejora el control de la enfermedad, sino que también empodera a los pacientes, dándoles un mayor control sobre su salud.
En el ámbito hospitalario, la implementación de sistemas de historia clínica electrónica (HCE) ha mejorado significativamente la eficiencia y la calidad de la atención. Estos sistemas permiten a los profesionales de la salud acceder rápidamente a la información médica de los pacientes, compartir datos entre diferentes departamentos y reducir errores médicos. Además, la HCE facilita la investigación clínica y la recopilación de datos para estudios epidemiológicos.
En nuestra reunión contaremos con la presencia de ponentes expertos en la materia junto a quienes esperamos obtener respuestas a algunas de las preguntas fundamentales que la digitalización nos plantea. La tecnología tiene el potencial de transformar radicalmente el ámbito de la salud y los cuidados, pero su éxito depende de nuestra capacidad para adaptarnos y aprovechar al máximo sus beneficios. En ADeNfermero, estamos comprometidos con liderar este cambio y asegurar que nadie quede atrás en esta revolución tecnológica.
¿Y qué hay de la ética?
Muchas veces en la búsqueda de la innovación nos olvidamos de volver la vista atrás y ver quién se ha quedado por el camino. Muchos de los modelos estadísticos para las pruebas y mediciones que usan este tipo de herramientas están enfocados a grupos poblacionales muy concreto (generalmente hombres, cisgénero, blancos y en situaciones socioeconómicas que podríamos considerar estándar en el polo occidental), lo que deja fuera a todo el espectro de personas que podrían estar atravesando distintas situaciones y grados de patología que no estarían reflejados. Las perspectivas de género, raza o clase son vitales y pocas veces son tenidas en cuenta.
Por otro lado, es necesario considerar la llamada brecha digital, que puede limitar el acceso a las nuevas tecnologías para ciertos grupos de población, como personas mayores o aquellas con bajos recursos económicos. Es fundamental trabajar para cerrar esta brecha y asegurar que todos puedan beneficiarse de los avances tecnológicos.
Además, la privacidad y la seguridad de los datos son preocupaciones importantes. La recopilación y el almacenamiento de grandes cantidades de datos médicos plantean riesgos de seguridad que deben ser gestionados adecuadamente. Es esencial implementar medidas de protección de datos robustas y garantizar que los pacientes tengan control sobre su información personal.
¡Por eso hay que estar al día!
Y liderar, desde la práctica enfermera, un correcto desarrollo y aplicación de estas innovaciones. ASí que ya sabes, acompáñanos el 7 de marzo en nuestra V Reunión Científica y ayúdanos a diseñar un mañana mejor y una sociedad basada en los cuidados.

Esta publicación entra dentro del proyecto «Cuidado, Conciencia y Prevención en la Lucha contra la Violencia de Género desde una Enfermería Innovadora» de ADeNfermero para la sensibilización y erradicación de la violencia de género, cofinanciado por el Ministerio de Igualdad.
